En la sección de salud mental, en el periódico digital británico, The Guardian, acaban de publicar (4 de Septiembre de 2015) un artículo relacionado sobre la Despersonalización.
Para aquellos que no sepáis inglés os lo voy a traducir:
DESORDEN DE DESPERSONALIZACIÓN: LA CONDICIÓN DE LA QUE NUNCA HAS OIDO HABLAR Y QUE AFECTA A MILLONES DE PERSONAS
(http://www.theguardian.com/society/2015/sep/04/depersonalisation-disorder-the-condition-youve-never-heard-of-that-affects-millions)
Uno de cada 50 de nosotros somos víctimas, y nos deja sintiéndonos como robots - y todavía los médicos tienen que buscar en Google qué es lo que es. Ahora una sufridora intenta ayudar a millones de personas a salir de este tormento.
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| Jane Charlton |
Jane Charlton no era ella misma cuando se despertó un día en Abril de 2002, era algo más terrorifico que cualquier resaca o mareo matutino normal - y no se fué en gran medida durante 3 años.
"Era la sensación de sentirte mal fundamentalmente en tu propio cuerpo", dice Charlton, intentando describir lo que era en gran medida indescriptible: los síntomas del desorden de despersonalización, la condición que consumió una gran parte de su vida.
"Era una constante y continua experiencia de otro mundo", dice, "Es un sentimiento de que, si te sientes de esta forma, no deberías estar existiendo al mismo tiempo. La sensación que me dejó de estar constantemente intentando agarrarme a la realidad, intentando recuperar lo que había tenido hacía solo unos pocos dias. Ayer tenía una vida, y ahora no tengo nada"
El desorden de la despersonalización (DPD en Inglés) es la más común de las condiciones psiquiatricas del mundo que permanece desconocida. Segun estudios en UK y en USA, el DPD podría afectar hasta un 2% de la población mundial, lo que constituye sobre 1,3 millones de personas en UK y 6,4 en los Estados Unidos.
La gente que tiene DPD describe una sensación de desconexión total, una vida vivida como un autómata o en piloto automático, caracterizada por una ausencia de emociones, tanto buenas como malas (Algo así como el éxito "Humanos" del Canal 4 en el que se encuentra encerrada una inteligencia, impotente, dentro del cuerpo de un robot" ). Ellos se sienten como si estuvieran observando su vida a través de una capa de cristal o una densa niebla, o como si estuvieran apareciendo en una película. Su cuerpo y su ser se hayan separados, sus miembros ya no parecen suyos.
"La mejor imagen que da idea de lo que me pasa es como si yo fuera un hombrecito sentado en la parte de atrás de mi cabeza, con los controles, y que tu puedes ver el interior de tu calavera y observar todo a través de las cuencas de los ojos", dice Charlton. "Cuando hablé por primera vez a mi padre, usé estas palabras: "Me he vuelto loca. Al final ha ocurrido, me he vuelto loca"
Si los estudios son precisos, más o menos tiene DPD el mismo numero de personas (o el muy relacionado desorden de Desrealización) que aquellos que son diagnósticados con esquizofrenia o TOC (Trastorno Obseso Compulsivo). Incluso casi todos los que tienen DPD narran años de temor y frustración sin ser diagnósticados. Ello garantiza incontables visitas a psiquiatras y médicos, quienes se encogen de hombros con perplejidad ya que nunca han oido hablar de esta condición.
Charlton, de 32 años, pretende acabar con este desconcierto. Ella espera aportar un mayor reconocimiento del DPD, ofreciendo a la gente una forma de escapar de este tormento único y acceder al mismo tratamiento que en algún momento la salvó. "Es un poco diferente de la mayoría de otros desórdenes, donde la gente dice que o no tiene buenos tratamientos o doctores adecuados para ayudarnos. Nosotros si los tenemos. Todo lo que necesitamos es un mayor conocimiento", dice ella.
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| Gemma Chan en "Humanos" del Canal 4 |
En el hospital Maudsley de Londres, en 1999 se abrió una clínica especializada en tratamiento clínico para el DPD y se atendió a mas de 500 pacientes en los primeros 6 años. Sin embargos, trabajadores de la clínica creen que esta cifra representa solo una fracción de la gente que tiene esta condición, cuyo diagnóstico a menudo se basa más en buscar ciertos términos en Google que en visitar a profesionales médicos. "Es frecuente que el punto de inflexión para sentirse mejor es tener un diagnóstico," dice Charlton. "Si podemos hacer algo tan simple como sacar adelante un diagnóstico durante unos cuantos años , no entiendo porqué no se está haciendo ya".
El texto más antiguo donde se menciona el término "despersonalización" como un apabullante , sentido clínico de separación lo encontramos desde finales del siglo XIX, ya que sus síntomas han sido frecuentemente presentados como un añadido a condiciones mejor conocidas, como desordenes de ansiedad y de depresión. Sin embargo, DPD puede presentarse de forma aislada y el sentir general es que el cerebro dispara un mecanismo de defensa natural contra la ansiedad extrema; y cuando se alcanza un determinado límite arbitrario entra en una completa desconexión emocional, arrebatando con ello tanto las sensaciones placenteras como las dolorosas; tanto el amor como el odio.
Mucha gente experimenta alguna forma de despersonalización durante sus vidas, típicamente en momentos de fatiga extrema o gran estrés, como cuando se tiene un accidente de coche, donde las dos opciones típicas de defensa, lucha o escape, se eliminan. Un elevado número de drogas también originan episodios similares. Sin embargo, DPD no siempre tiene indicios tan obvios, ni disminuye, dejando a uno atascado en un páramo baldío de emociones.
Charlton era una estudiante de 18 años, de alto rendimiento, satisfecha, cuando su despersonalización comenzó a mitad de su primer año universitario. Mientras estaba en una fiesta con su novio, en Francia, intentó llegar a lo más alto comiendo un yogourt mezclado con cannabis, pero sus síntomas - que podrían sonar similares a cualquiera que haya fumado un poco de cannabis - fueron más debilitadores y se quedaron por mas tiempo de lo que biologicamente era previsible.
Un episodio de DPD inducido por empleo de drogas no es raro, y se conocen casos de consumidores habituales que de repente fueron incapaces de salir, ni para adelante ni para atrás. (Charlton había probado el cannabis solo en una ocasión anterior). Pero otros disparadores principales del DPD incluyen un unico evento traumático o periodos sostenidos de abuso emocional o físico. Otros han experimentado este desorden sin tener ni idea de qué pudo originarlo.
Rachel (no es su nombre real), una graduada en arte de 23 años asegura que la despersonalización le sobrevino a los 18, mientras estaba sentada en su jardín trasero mientras revisaba un exámen de nivel A. Aunque ella había tenido propensión a tener ansiedad de pequeña, el ataque de DPDR fue inmediamente severo y la dejó en un estado medio zombi. "Yo estaba completamente segura de que estaba muerta, de que todo era completamente inutil", dice. " Y si no estoy muerta. entonces ya no me importa nada ya que yo no tengo nada que ver con todo esto"
Rachel es la hija de un GP, pero aunque él simpatizaba del todo y dirigió la busqueda de ayuda para ayudarle con su condición, el desconocía por completo inicialmente lo que era el DPD como cualquier otro. Encontró detalles de DPD en Internet, que llevó a un antes y un después en los esfuerzos de su hija. Ella fue entonces capaz de empezar un proceso de aprendizaje que le llevó al hospital de Maudsley.
"Es una forma tan eficiente para que tu mente combata la ansiedad, que te hace un lío brutal" Dice Rachel. "Tanta gente lo sufre, pero no hay literalmente información sobre ello. Mi padre encontró un articulo en una pequeña web y sin él me hubiera quedado destrozada"
Sea lo que sea que inició la DPD, los sufridores relatan síntomas muy similares. Ellos hablan de barreras entre la vida real y la conciencia, de vacío, de futilidad y de extrañeza. Hay dos libros escritos por el periodista americano Jeffrey Abugel, titulados "Sintiéndose irreal" (Feeling Unreal) y "Un extraño para mi mismo" (Stranger to my self) que pretenden evitar que la gente experimente DPD. Charlton por su cuenta llegó a la misma imagen del hombrecito sentado sobre su calavera, pero se sorprendió al ver pintada exactamente la misma figura. Es una de las imagenes que salen en "Google Imágenes" al buscar DPD.
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| El periodista Jeffrey Abugel, que ha escrito dos libros sobre DPD |
DPD es diferente de la esquizofrenia o de la psicosis ya que la gente que lo tiene nunca están convencidos de una realidad alternativa, de que los objetos o lo gente sean otra cosa de los que realmente son. Sin embargo, DPD presenta un mundo de metáforas y similitudes: la gente a menudo habla sobre sus experiencias "sientiendose como si..." o "parecido a " que algo raro y extraño haya ocurrido.
Es más , la gente con DPD, a menudo no aparece mal o diferente para nada delante de sus conocidos más cercanos; a pesar de experimentar una absoluta falta de empatía, los amigos y familiares no distinguen ningún cambio acusado. La persona con DPD suele ser capaz de deambular medio en sueños por su vida diaria e incluso mantener estrechas relaciones, pero carece de los picos y valles emocionales de una existencia humana normal. Solo persisten las sensaciones de distanciamiento del mundo.
Que las experiencias sean tan iguales entre la gente con DPD ha permitido a los especialistas médicos no son determinar sin dudar que es una condición real y actual, sino también crear una lista de síntomas declarados por la gente, ayudando tanto al diagnóstico como al tratamiento.
Aunque la investigación sobre lo que causa el DPD está todavía en una fase relativamente temprana, estudios de imágenes médicas e investigaciones sobre fluctuaciones de la conductividad de la piel y pasos cardiacos nos ofrecen algunas pistas. Los psicólogos han detectado que parece ser una desconexión entre las partes del cerebro que gobiernan la emoción y aquellas que determinan el pensamiento racional. Durante los estudios, los sujetos debian decir si se sentían ansiosos o asustados por indicadores conocidos que causan reacciones estresantes, pero sus respuestas corporales permanecieron inalterables.
"De alguna manera la falta de congruencia entre la forma en que sienten mentalmente y la forma en que sienten físicamente añade a este sentimiento el de estar cercenado y alienado del mundo, " dice Anthony David, profesor de neuropsiquiatría cognitiva en Maudsley, y el director fundador de la clínica sobre DPD.
La despersonalización surgida por tomar drogas puede ofrecer algunas pistas."Hay obviamente una bioquímica que podría ser importante también, un cambio en neurotransmisores del cerebro que podrían llevar a este tipo de estado," dice David.
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| Los psicólogos han detectado en los pacientes de DPD una desconexión entre las partes del cerebro que gobiernan la emoción y aquellas que determinan el pensamiento racional. Foto de Nick Dolding/Getty Images |
Varias medicinas usadas para tratar desórdenes de ansiedad y epilepsia han ayudado en algunos casos de DPD, pero todavía no hay ninguna conocida que sea efectiva en todos los casos. David resalta el estudio actual sobre la estimulación magnética transcraneal, que puede ajustar las influencias relativas de diferentes secciones del cerebro y que puede, con el tiempo, convertirse en una opción terapéutica para la gente con DPD.
Actualmente, el tratamiento más efectivo es una ligera variación de terapia cognitiva conductista, centrándose en romper los circulos viciosos en que los pacientes parecen atrapados. La gente que experimenta DPD se encuentran viviendo sobre sus propias sensaciones peculiares, lo que puede exacerbarlos, y renunciar a las interacciones sociales, lo que puede servir para aumentar el sentimento extremo de separación. Cuando los síntomas persisten, los sufridores se sienten más desmoralizados y temen que no hay ninguna solución, lo que además puede infundir desesperanza.
"Es muy dificil funcionar así, y algunas veces la gente simplemente se rinde", dice la doctora Elaine Hunter, la psicóloga jefe de la clínica Maudsley. "(Pero) nosotros tenemos técnicas para tratar con los contenidos de los pensamientos. Podemos tratar con los procesos, intentar interrumpirlos. Podemos tratar la anulación."
Muchos pacientes buscan entornos donde saben que sus síntomas serán menos extremos: a menudo lejos de luces brillantes y repitiendo una rutina familiar; los hábitos de un recluso. Tanto Rachel como Charlton me contaron como de aburridos podrían llegar a ser sus episodios de vida en soledad. Charlton, en un momento determinado, solo podía reunir la energía suficiente para jugar al Yahtzee consigo misma durante horas y ultimamente, durante su recuperación, postpuso sus estudios universitarios para trabajar en una librería, donde disfrutaba de la monotonía de poner sellos a los libros y colocarlos en las estanterías.
A pesar de terminar su carrera, Rachel dice que su despersonalización significa que no puede implicarse totalmente, y se lamenta del tiempo que su enfermedad le ha hecho perder. " Sé que soy inteligente y muy capaz, pero sé que he pasado gran parte de los ultimos 5 años sin hacer nada, solo dándole vueltas y pensando sobre mi propio estado. He perdido mucho tiempo," dice.
Aunque la mayoría de los que tienen DPD suelen estar al final de la adolescencia o al principio de la veintena, a muchos otros les ha durado el desorden por décadas, habiendo abandonado los intentos de ser creidos y comprendidos, y mucho menos curados. Allen Killick, de 72 años, sufrío DPD por primera vez en 1954 y todavia recuerda su aparición vívidamente.
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| Jane Charlton: "Cuando hablé por primera vez a mi padre, las palabras que usé fueron: "Me he vuelto loca" Foto de Linda Nylind para The Guardian | | |
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"Estaba jugando al futbol en el colegio", Killick escribió en un email. "Por alguna razón me miré las manos y mi mente dijo, "No son tuyas", empecé a gritar y a correr en todas direcciones horrorizado."
Cuando solo tenía unos pocos meses de edad, la casa de Killick fue destruida por un cohete V2 y fue rescatado de debajo de los escombros tras ser dado por desaparecido durante dos días. A continuación sufrió una infancia llena de abusos físicos extremos y psicológicos por parte de sus padres y sus abuelos, lo que le llevó (Según dicen ahora los psicólogos ) al desorden que todavía juega un gran papel es su vida.
Con el pasar de los años, ha sido tratado mas de una vez y le han suministrado medicamentos poco efectivos que han inhibido todas las otras funciones. A mediados de los 70, dice que pasó dos años casi como un ermitaño, confinado en su dormitorio. Killick sin embargo también se casó y tuvo hijos, y ha tenido varios trabajos, gracias a los consejos de psiquiatras, psicólogos y de libros de auto-ayuda para hacer más largos los periodos entre episodios extremos de DPD.
"He tenido ocasiones de sentirme mejor, pero incluso hasta el día de hoy nunca me he llegado a sentir totalmente yo mismo", dice. "Siento que una de las cosas más duras sobre el DPD es intentar pretender que eres normal cuando tratas con otras personas, cuando lo único que quieres hacer es escapar corriendo... Intento sufrir esto en silencio porque si intento explicarselo a cualquiera, nadie, excepto otros sufridores de DPD saben de que les estoy hablando."
La campaña de Charlton para aumentar la sensibilización persigue ayudar a la gente con DPD a superar su sentimiento de aislamiento. Ha escrito a su MP, al instituto de psiquiatría y al departamento de Salud, esperando que al menos llegue una breve notificación a cada GP del país describiendo por encima esta condición. Ella recientemente visitó la sede central de "Rethink Mental Illness" para dar una charla al equipo de asesores para que reconozcan los síntomas del DPD.
El personal del Maudsley dice que, con ayuda, la intensidad de incluso los casos más extremos de DPD puede ser reducida. No siempre hay una solución rápida, pero esperan al menos ser capaces de educar a los clínicas del pais a poner a los pacientes en la senda correcta.
Killick escribió: "He tenido en los ultimos 61 años un sentimiento permanente de que no existo. Nada de lo que haga o piense parece cambiar este sentimiento. Quiero ser yo, o lo que sea que soy yo. Añoro mucho eso."
- Consejos e información del "Rethink Mental Illness" en el número 0300 5000 927 (De 10:00 a 14:00 de Lunes a Viernes); dirección de correo: advice@rethink.org
(Traduccion al español de Santos Barrios Canseco)
santos.barrioscanseco@gmail.com
